TRATAMIENTO DEL BRUXISMO
El bruxismo (rechinamiento de dientes) es una afección enmarcada dentro de las patologías del sueño y esta asociado al estrés y trastornos emocionales. Se produce por una contracción excesiva de los músculos encargados en la masticación. Habitualmente es nocturno, sin embargo, puede ser también diurno. Se produce en forma inconsciente, por este motivo la persona que lo padece no puede controlarlo a voluntad.
Como muchas de las patologías que afectan el cuerpo humano, comienzan sin causar grandes alteraciones en nuestro organismo.
Cuando una persona empieza a bruxar o rechinar los dientes, las afecciones o síntomas muchas veces son mínimas y la persona que la padece no le da la importancia debida. Por esta razón, su tratamiento temprano muchas veces no es atendido.
Como muchas de las patologías que afectan el cuerpo humano, comienzan sin causar grandes alteraciones en nuestro organismo.
Cuando una persona empieza a bruxar o rechinar los dientes, las afecciones o síntomas muchas veces son mínimas y la persona que la padece no le da la importancia debida. Por esta razón, su tratamiento temprano muchas veces no es atendido.
¿Que sucede si no tratamos tempranamente el bruxismo?
Al igual que otras enfermedades que no son tratadas en su fase inicial, el bruxismo si se mantiene en el tiempo sin un tratamiento adecuado, puede traer y acrecentar consecuencias que perjudican al sistema masticatorio y a la vida diaria del que lo padece.
A mediano y largo plazo, está patología puede producir alteraciones en el ciclo del sueño (microdespertares) produciendo una deficiencia en el descanso reparador diario, dolores y contracturas en los músculos faciales, de cabeza y cuello, dolores de cabeza o migrañas, alteraciones y dolor en la articulación témporo mandibular (ATM), acúfenos en el oído, desgaste, dolor y fracturas dentales, aumento de movilidad dental e infringir alteraciones irreversibles en implantes dentales acortando se sobremanera su vida útil.
A mediano y largo plazo, está patología puede producir alteraciones en el ciclo del sueño (microdespertares) produciendo una deficiencia en el descanso reparador diario, dolores y contracturas en los músculos faciales, de cabeza y cuello, dolores de cabeza o migrañas, alteraciones y dolor en la articulación témporo mandibular (ATM), acúfenos en el oído, desgaste, dolor y fracturas dentales, aumento de movilidad dental e infringir alteraciones irreversibles en implantes dentales acortando se sobremanera su vida útil.
¿Como se trata el bruxismo?
El tratamiento debe ser integral y abarca diferentes terapéuticas dependiendo en la etapa que se encuentra. No es lo mismo un tratamiento en la persona que recién a comenzado a rechinar sus dientes a una persona que lleva años haciéndolo.
Dentro de la terapéuticas utilizadas podemos nombrar:
No en todos los casos es necesario utilizar todas estas técnicas para controlar el bruxismo, depende de cada caso.
Dentro de la terapéuticas utilizadas podemos nombrar:
- Placa miorrelajante u orgánica: Este tipo de placas o “protectores” debe ser realizado por un odontólogo y es utilizada por el paciente cuando duerme y en ocasiones durante el día. Su función es equilibrar la mordida y proteger a los dientes (y a implantes dentales) de fuerzas excesivas que el sistema masticatorio no está preparado a resistir. A su vez, el diseño de este protector, disminuye la función muscular excesiva y protege a la articulación (ATM). Una placa miorrelajante adecuada NO DEBE SER BLANDA Y NO DEBE SER DELGADA.
- Aplicación de toxina botulínica (Botox): Está toxina es la misma que se utiliza en tratamientos estéticos antiage y se aplica en los músculos masticadores que mayor prevalencia tienen en el bruxismo: músculo masetero y temporal. La toxina botulínica es aplicada en dichos músculos mediante pequeñas inyecciones en las que no se necesita anestesia previa. La función es evitar la contracción excesiva de dichos músculos en forma temprana y la pérdida de volumen y potencia a largo plazo. Las aplicaciones se deben realizar cada seis meses y un total de 4 veces.
- Tratamientos kinesiológicos: Es extremadamente importante en casos donde exista un sintomatología muscular y articular. El kinesiólogo tratante, debe tener conocimiento específico sobre esta patología. Dentro de las técnicas a utilizar podemos nombrar la sacro craneal, que además de producir relajación en los músculos involucrados, produce una disminución en la ansiedad del paciente, también se utilizada la osteopatía y técnicas de fisioterapia.
No en todos los casos es necesario utilizar todas estas técnicas para controlar el bruxismo, depende de cada caso.
En nuestro consultorio, realizamos este tipo de tratamientos y trabajamos en equipo con kinesiólogos capacitados en este tipo de patología.